Nota exclusiva con Antonio Garabal, una parte de la historia de Ferro

(reportaje realizado en Noviembre del 2001)

ANTONIO GARABAL jugador de Ferro durante los años 1953-1954, 1956, 1959 y 1961-1966, 170 partidos, 53 goles

 Ha sido un orgulloso para nosotros inaugurar la sección con una gloria del fútbol de Ferro de la década del 50.

 ¿Cómo fueron sus inicios en el Fútbol?

Empecé probándome en San Lorenzo, pero tenía mis abuelos en Caballito y frecuentaba mucho el barrio, la Iglesia, el Cine, hasta que un día un Señor que tenía un bar formó un equipo y fuimos hasta el Campeonato Evita.

¿Cómo llegó a Ferro?

Una vez pasó por mi barrio un sifonero que a la vez era delegado de Ferro y me preguntó si me quería ir a probar a Ferro, le dije que si!

Jugué 10 minutos y Carochero (el Técnico) me sacó enseguida, estaba amargado porque me había sacado, pero a los 20 minutos hubo un penal  y estando afuera me dijo que lo pateara yo. A la noche vino el delegado del Club, habló con mi papá y tuve la fortuna de quedar en Ferro.

¿Me imagino la emoción que sintió cuando le dijeron que quedaba?

No te imaginas, yo me había probado en San Lorenzo y había quedado pero me fui porque no me daban la camiseta, cuando me dijeron de quedarme en Ferro, tuve una alegría inmensa

Garabal durante la nota

¿Qué reflexión le da el fútbol?

El Fútbol tiene la solución más rápida para el Club, hay dos factores que son la base fundamental, el primero, es que para asegurar el éxito deportivo en el Fútbol, hay que tener goles,  el segundo es el económico, vendes dos delanteros y salvas la situación económica del Club, por eso hay que dedicarse fundamentalmente a los delanteros, sin desatender el resto.

¿Entonces la clave para salvar al Club viene por el lado futbolístico?

No hay duda, pero hay que medirlo muy finito, porque así como te salva, sino lo medís bien te manda a la ruina, y eso es lo que está sufriendo Ferro a través de un mal manejo desde hace unos cuantos años. Nosotros tal vez, tenemos el error de éste último descenso, pero no lo hundimos al Club económicamente.

¿Usted no cree que hace tiempo que no se trabaja en inferiores seriamente?

El Fútbol Amateur es donde debe hacerse más hincapié, de ahí nace la semilla para que todo pueda salvarse y se está manejando hace muchos años muy mal. Ferro dejó de tener docencia en las Divisiones Inferiores. Hubo buenos técnicos pero faltó asesoramiento desde la época que se fue Griguol. Cuando él se fue, se acabaron las Divisiones Inferiores.

¿A pesar de haber quedado gente del equipo de Griguol?

No es lo mismo Griguol que la gente que estaba con él, ahí Ferro hipotecó su futuro, no solamente porque no se preocuparon por buscar jugadores afuera, sino porque además se llenó de representantes. El Club debía haberse preocupado en estos años por tener gente que camine por afuera, no se invirtió en eso, no se capacitó, se descuidó y hoy Ferro está peleando con los pocos chicos que han quedado. Hay que cuidar lo que tenemos pero hay ir regándolo para que esa semilla vaya progresando.

Tapa de la revista "Mundo Deportivo"

¿Sin embargo pareciera que la idea es tener cada vez menos chicos en la pensión, no es más difícil?

Si, se fue reduciendo poco a poco, pero era lamentable ver como había mas de 80 chicos de pensiones y algunos en los partidos de divisiones inferiores ni siquiera estaban en el banco. El sistema era malo, hay que tener chicos en la pensión, que tengan posibilidades comprobadas que puedan jugar en Primera División y ser titulares. 

Ahí es donde Ferro ha tenido un déficit económico, manteniendo gente que no podía llegar. Por eso hay que tener la capacidad, idoneidad y conocimiento para formar jugadores que puedan llegar. Pero hay que tener la persona que diga este chico va a tener futuro, hay que dejarlo, y entonces lo respaldas, le das estudio, porque así y todo nadie puede asegurar que ese chico va a llegar. 

¿Hoy esa gente que los apuntale, en Ferro no está?

No, en estos momentos no está la persona que cumpla esa función.

¿Cómo fue el debut en Ferro?

Fue en un amistoso en Olavaria, al lado del Charro Moreno. Oficialmente fue contra Racing.

¿Usted fue el reemplazante natural de Piovano?

Si, Piovano ya estaba terminando su carrera y fue muy productivo para Ferro, fue un puntero goleador muy querido.

¿Cómo se define Usted como jugador?

Mis armas eran la cintura y la velocidad, podía entrar tanto en diagonal como ir por la raya y desbordar, era bastante completo y tenía buena predisposición para el arco, tenía puntería, no era goleador neto pero estaba siempre ahí y hacía hacer goles también. No está en mi decir si era bueno o malo, lo único que sé positivamente es que para los rivales era peligroso, ya que los escuchaba a ellos hablar.

¿Cómo es eso de los rivales?

Mira, cuando estaba en las Divisiones Inferiores y los chicos me preguntaban: ¿Antonio, como ando?, yo les decía que el mejor índice para medir como estas, es si los contrarios se preocupan  por vos y dicen ¡marquen a ese!, entonces significa que estas jugando bien.

Figurita de la época

¿Siempre se hablo de aquella inolvidable delantera Juárez, Berón, Acosta, Lugo y Garabal, que nos puede decir al respecto?

A través de los años, creo que fue el mejor equipo que jugo al futbol, dicho por los hinchas de Ferro que todavía perduran. Ese equipo salió segundo con Independiente, y por diferencia de goles quedamos terceros.

¿En ese equipo jugó también Roma y Marzollini?

Si, efectivamente, jugaba Roma, Mogaburu, Marzollini, Ríos, Balay, Devita, y adelante Juárez, Verón, Acosta, que reemplazó a Méndez (un uruguayo fenomenal pilar del ascenso del 58 de Ferro), Lugo y Garabal. Y este equipo estaba tan hermanado que por eso fue un gran equipo.

¿Por qué no pudo ser campeón funcionando tan bien?

Empezamos muy mal, teníamos jugadores lesionados, suspendidos, particularmente estuve 6 fechas sin jugar, y tuvimos 12 partidos sin ganar, 5 empates y después 17 partidos sin perder. Cuando el equipo empezó a ensamblarse vinieron los triunfos y podíamos haber salido campeones si el equipo no hubiera tenido los problemas del principio. Fijate que a San Lorenzo que fue el campeón le ganamos 3-0 en nuestra cancha.

A lo largo de su amplia trayectoria en Ferro, ¿Cuál fue el momento o el partido que mas recuerda?

Tengo muchos, pero recuerdo un partido con River en el año 1965 en donde hice el primer gol del campeonato, o algunos partidos donde tuve la suerte de convertir 2 goles.

¿Es tan especial gritar un Gol?

Gritar el gol es la emoción máxima del fútbol, yo era un loco gritando los goles, el técnico me decía: ¡para un poco, que te vas a lastimar!. 

¿El marco de gente o hacer un gol a un equipo de los grandes tiene una doble satisfacción?

Ayuda, pero no cambia, gritar un gol era lo mismo que cuando estaba en divisiones inferiores, porque lo que se siente es la emoción, tu festejo intimo, es haber dado una satisfacción a un Club que en aquella época era el “Señor Club”. Desgraciadamente llegamos a una situación económica lamentable y hoy hay que trabajar mucho para no dejarlo caer. Siempre digo que la hinchada y el simpatizante de Ferro sufre desde hace muchos años y si pudiera volver a jugar lo haría hasta gratis, para poder darle una alegría.

Antes se podía decir que se jugaba por amor a la camiseta, sabemos que ahora no lo es, ¿a qué se debe este cambio?

Tal vez porque haya muchos mas cambios de nombres de jugadores, y no existe estabilidad en los planteles. Antes el hincha sabía que su equipo jugaba casi siempre igual. El amor por la camiseta sigue existiendo pero no como antes.

¿Cómo fue su llegada a  Boca?

En el año 1954 voy a Boca en trueque  por Herminio Gonzales durante un año, luego regreso a Ferro.

¿También tuvo un paso por el fútbol europeo, el Atlético Madrid?

Si,  yo estaba jugando para Ferro y para la Selección Nacional y me venden al Atlético Madrid.

Figurita de le época

¿En esa época, pasar a un equipo europeo era algo increíble?

Si, era sacarse la lotería, y no quería ir porque quería jugar el Sudamericano para Argentina en Lima, me había negado a ir. Pero me convencieron algunos compañeros de la Selección. Al presidente de Ferro le dije que no me iba y me preguntaban si estaba loco. 

Entonces vinieron Federico Bayro y Pipo Rossi y me dijeron que eso era como sacarse la lotería, y que no podía negarle a mi familia el bienestar que le iba a hacer perder. Entonces me puse a llorar y finalmente me fui.

Argentina por esos años no tuvo un buen desempeña a nivel Selección, ¿a qué se debió?

Hubo un éxodo importante de jugadores que fueron para Europa, y la Selección quedó diezmada. En esa época los jugadores que estaban en el extranjero no podían utilizarse, y se recurrió a  muchos jugadores que estaban terminando su carrera, como Labruna. Esa Selección que salió campeón Sudamericano en Lima y que después fue desmantelada jugaba tan bien que en los partidos amistosos no había lugar.Tenías a Corbata, Maschio, Angelillo, Roma, Del Acha, Valdo, Jiménez, Rossi, Echarle, Garabal, como suplentes estaba Lugo, San Filippo, Bruque, Burdoy, el gitano Juárez, Pererzoli y Pizarro.

¿Cuál es el gol que más recuerda para la Selección Nacional?

Hice el gol del triunfo cuando jugamos con Brasil en el Maracaná, hace cuarenta años atrás. Recuerdo que cuando hice el gol me fui al rincón del corner a gritar el gol a unos tripulantes de un barco carguero que estaban con la bandera argentina. No cabía en mi tanta alegría y tanta felicidad.

Después de su paso por el Atlético Madrid, vuelve a Ferro nuevamente?

Si, cuando estaba por empezar el Campeonato  me contrata Armando de Boca junto con Lugo, pero nos dio a préstamo un año a Ferro con la condición que después le diera algún jugador. Entones se decidió vender a Marzollini y a Roma. En el año 1960 juego en Boca y terminada la temporada vuelvo a Ferro, y termino mi carrera jugando el último año en San Lorenzo.

¿Cómo comienza su etapa como Director Técnico?

Me retiro en el año 1966 y al año siguiente junto a Moguilevsky empiezo a dirigir a Ferro, empecé probando, entrenando al equipo y las cosas comenzaron a funcionar bien.

¿Cuál fue el momento más triste que pasó en Ferro?

Yo me fui al descenso con Ferro, fui uno de los culpables de ese descenso como jugador, pero también fui uno de los culpables del Ascenso de Ferro en el año 1963 Ese año que descendimos no anduve bien, y me consideraba culpable por no haber jugado a mi nivel. No quería salir a la puerta de calle, me daba vergüenza que los pibes me dijeran que me había ido al descenso. Nadie sabe lo que es estar vistiendo la camiseta e irse al descenso, yo me sentí culpable.

¿Alguna vez lloró por Ferro?

Seguro, el que quiere al Club de verdad en esas circunstancias llora, hice promesas a Lujan de ir caminando para que ascendiera y lo cumplí. Llegué emocionado de haber llegado, de haber cumplido y de haber ascendido con Ferro.

Siempre se habló del mito  que el Fútbol de antes era mejor que el actual, ¿Qué hay de cierto en eso?

Hay algo fundamental que debe tomarse en cuenta, a la velocidad que se juega ahora, el jugador tiene mucho menos tiempo para improvisar, entonces al jugar tan comprimido y con tanta rapidez, no se hace un buen espectáculo. Antes había jugadores que jugaban parados y que solo les bastaba la calidad, hoy no se si podrían jugar.  Hoy en día está todo tan materializado, que un jugador que juega parado es reprobado por sus propios compañeros.

A veces hay casos como el de Riquelme, que siempre está bien ubicado, ese es un típico jugador de mi época. Pero por el  lado del espectáculo, era mejor el fútbol de antes.

Usted tuvo la oportunidad de ser jugador, ser técnico y ser dirigente, ¿Cuál es la posición que más le gustó?

Por lo que representa para mí, ser Jugador, que es lo que quise ser toda la vida. Lo que se siente siendo jugador no lo vas a sentir como Técnico ni como  Dirigente. Recuerdo que cuando era chico y me preguntaban que quería ser cuando sea grande, respondía jugador de fútbol, y todos me miraban asombrados, pero Dios y el destino quisieron que lo sea.

Usted tuvo que vivir una circunstancia difícil cuando en Mayo del 2000, dirige a la Primera de Ferro en aquel partido contra Lanus, donde Ferro pierde 7-0  y desciende. ¿ Qué sentimiento pasó por su mente?

Sentí una tristeza enorme por todos, porque a pesar que ya sabíamos que nos íbamos, ese fue el golpe de gracia. Pero estoy con la conciencia tranquila que lo hice por Ferro, y si me lo vuelven a pedir, para que ponga la cabeza en algo, la voy a seguir poniendo, porque Ferro a mí me dio todo, y yo a Ferro no le puedo negar nada. Lo digo con emoción y sé que los hinchas de Ferro me comprendieron, que no salí a la cancha por querer ser nada, simplemente no había quien saliera y no podía permitir que Ferro saliera sin nadie a la cancha, abandonando a los jugadores, a la hinchada, y al club, y dejando que el ultimo partido de Ferro fuera una vergüenza y que  no saliera nadie. Lo hice por querer a Ferro, por todo lo que me aprecian y por todos lo que saben que no fui a buscar nada. Si lo tuviera que hacer otra vez, lo haría.

Este es nuestro homenaje a quienes con su humildad y trabajo fueron y son orgullo de Ferro, además de ser parte de una historia que engrandeció a nuestro Club.

Por ello, y porque creemos que los reconocimientos deben hacerse en vida, nuestro humilde homenaje para Antonio Garabal

                                                        Gracias! ! !