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Por los Medios
Así vieron el partido los distintos medios de prensa
DIARIO CLARIN: Sin fútbol y sin emociones
Aburrieron a todos entre el local y los tucumanos. Apenas tuvieron un tiro en el palo cada uno.
Pocas emociones para el aburrido empate en cero que ayer protagonizaron Ferro y San Martín de Tucumán en la fría tarde de Caballito. Pocas emociones para un Ferro que aspira a consolidarse y que buscaba su segunda victoria como local en el Clausura. Pocas emociones para San Martín de Tucumán que necesita imperiosamente conseguir puntos en su lucha por no descender.
Fue el equipo tucumano el que propuso juego —con toques y lujos incluidos— y buscó con insistencia abrir el marcador. Y a los cinco del primer tiempo tuvo la chance más clara de todo el encuentro. Alejandro Migliardi, el arquero local, calculó mal en la salida de un centro y Luciano González, el lateral derecho tucumano, con todo el arco a su disposición y con pelota dominada, la estrelló en el poste izquierdo. Desde ese entonces la visita siguió buscando el gol que nunca llegó. ¿ Y Ferro? Ferro esperó y trató de aprovechar cada contragolpe que generó, con más empuje que juego.
En el segundo tiempo, el local intentó imponer su estilo, pero sólo quedó en eso, en un intento. Carlos Castilla, el hombre de punta local, tuvo la oportunidad de romper ese cero que fue inquebrantable, cuando estrelló la pelota en el palo de un Javier Lavallén que estaba vencido. Luego los tucumanos mostraron mucho de su buen juego colectivo, pero acusaron la falta de profundidad y las veces que llegaron, no fueron eficaces a la hora de definir.
Cuando Pablo Giménez pitó el final el punto pareció quedarle justo a dos equipos que sólo dieron pocas emociones.
DIARIO OLE: Palo en la Rueda
El Verdolaga no levanta: con el punta como figura, San Martín (T) lo superó y pudo haberlo ganado, pero el palo se lo negó. El Verde tuvo una y también fue caño.
A Ferro no le sale una. Claro, usted dirá ¿Cómo, si ganó en Córdoba? Es verdad. Sin embargo, el triunfo que se esperaba fuera una catapulta anímica para el Verdolaga sólo fue una falsa alarma de mejoría. Ayer, cuando la reafirmación de la levantada debía rubricarse en casa, todo volvió a fallar. San Martín (T) fue superior y, con Rueda a la cabeza, se llevó un empate valioso. En Caballito ya hay vientos de preocupación...
Roldán, caliente por el 2-2 ante Ben Hur, había metido mano en el esquema: agregó marca (metió un doble cinco formado por Avila y Cravero), sacó uno del fondo y apostó a un dúo nuevo en ataque integrado por Rueda y Morales. Y aquello que imaginó cuando armaba su nuevo dibujo en la pizarra, se plasmó en la cancha. Hubo toques, triangulaciones, tacos y lujos. Y Ferro, perdido en las marcas, lo sufrió: Zárate correteó libre por el medio (Carabajal nunca lo pudo tomar) y el mendocino demostró en ofensiva una categoría de primera. Desbordaba, asistía y hasta casi la clava en un ángulo. Además, Jota Jota anduvo bien acompañándolo. El Mago no veía respuestas, y por eso estuvo más tiempo dando indicaciones que sentado. La visita tuvo la ventaja tras una mala salida de Migliardi, pero Lucho González como delantero es un excelente zaguero y le acertó al palo izquierdo del local, a dos metros de distancia. El Verde zafaba...
El dominio Santo fue cayendo hacia el final del partido. Akerman, único soldado rescatable de un ejército perdido, buscó y buscó. Pero Castilla no estuvo fino (erró una abajo del arco y otra la embocó en el palo), y Castellani tampoco se conectó. Así la visita sumó un punto ¿Y Ferro? Mirando los promedios, perdió dos.
Ferro fue el campeón
Ayer estuvo en juego el Trofeo Comuna de Caballito. Como no hubo ganador, la copa quedó en manos del club local.
Uno con nanas
A último momento Garré tuvo una baja: Cristian Pino se quedó afuera tras sufrir una contractura en el cuádriceps.
3 partidos sin ganar
San Martín sigue mal de visitante: lleva dos derrotas y un empate.
LA GACETA - TUCUMAN: El balón pegó en el palo y San Martín no pudo ganar
Los “santos” igualaron sin goles con Ferro, en Caballito. El partido fue aburrido, pero el equipo de “La Ciudadela” tuvo algunas chances para anotar.
"Palo, palo, palo, palo bonito, palo es”. ¿Es? Serán bonitos para el creador del cantito que entonan los equipos que son campeones otra vez, pero no para San Martín. Menos que menos para Luciano González, el increíble “Lucho” que protagonizó la jugada del partido. ¿Cómo fue? Mirarlo será muy fuerte, léanlo primero: el defensor subió a cabecear un centro, el arquero Migliardi salió a cualquier parte, quedó tirado en el suelo y Luciano, a un metro del arco vacío, remató y la pelotá ¡pegó en el palo! ¿Bonito? Difícil...
Esa fue la situación más clara que tuvo el “santo” en Caballito, pero no la única. A la frustrada por el palo feíto se sumaron situaciones con Luis Rueda como protagonista. Fueron dos: primero, el “Cóndor” sacó un tiro terrible desde afuera del área que le suspiró de cerca al travesaño; después, se mandó una gran jugada personal y entró al área, pero su remate fue controlado por Migliardi. San Martín triangulaba, buscaba abrir el juego por las bandas y con eso era más que un rival inmaduro.
Mientras tanto, Ferro avanzaba a los empujones y la primera situación de peligro la tuvo con un tiro libre de Julián Kmet. Cuando promediaba el primer tiempo, Oeste reordenó la mitad y manejó mejor la pelota.
Ambos equipos demostraban que tenían puesta la mira en el arco rival y por eso el partido era entretenido. Pese a la mejoría en el equipo de Garré, San Martín no se desesperó y otra vez se perdió el primero cuando Rueda tuvo esa chance que le tapó Migliardi. Dos minutos más tarde, Ferro contestó con su delantero más peligroso. No, no es Carlos Castilla sino Damián Akerman, que les ganó la pelota a Monge y compañía, pero que, a la hora de definir, eligió el camino incorrecto ya que no buscó a Kmet, que después se acordaría de la madre.
Akerman tampoco pudo
La calma reinaba en el comienzo del complemento. El inesperado frío ambientaba la tarde de Caballito hasta que apareció otro palo, pero esta vez en contra del local. Castilla conectó un centro de Akerman, pero su remate pegó en el poste derecho.
Esa jugada despertó nuevamente el encuentro y fue golpe por golpe. El duelo fue uno de esos choques en los que el equipo que hace el gol, gana. Sobre el final, la única: otro disparo furioso de Akerman le quemó las manos a Javier Lavallén, el arquero que suele persignarse ante el arco. Así, a veces los palos se portan bien; a veces, no.
BUENOS AIRES (DyN), especial para LA GACETA, por Ezequiel Soto
VIVAFUTBOL.COM.AR: FERRO Y SAN MARTIN EMPATARON EN POBRÍSIMO ESPECTÁCULO
Tan gris y frío como la tarde. Ferro y San Martín de Tucumán no se pudieron abstraer de la opaca tarde
de sábado y armaron un pobre empate sin goles, que obviamente le cayó mejor a los visitantes.
Ferro no jugó bien y no le impuso condiciones a su rival en ningún momento a pesar que durante algunos pasajes de la primera etapa pisó bastante el terreno rival. San Martín por su parte, salió a hacer su negocio, que era poblar la media cancha para robarle la pelota al local y buscar rápido a sus puntas.
A los cuatro minutos, Oviedo se perdió un gol increíble en la misma raya del arco en lo que fue obviamente la más clara de todo el partido. Luego fue un partido aburrido porque el local nunca terminó de tomar las riendas del partido y nunca pudo organizar un ataque bien jugado (el único que se salvó en ofensiva fue Akerman, hombre de mucha movilidad y muy peligroso) y San Martín nunca se terminó de convencer que la victoria era posible con un poco más de audacia.
Si el primer tiempo había sido regular, el complemento fue peor y el último cuarto de hora fue espantoso.
En definitiva, Ferro deberá mejorar mucho su prestación futbolística para pelear más arriba y sobre todo para sumar de a tres en Caballito mientras que San Martín se fue conforme por el punto pero de ninguna manera con lo que mostró ante el Verde.
FERRO (0): Migliardi; De la Canal, Macalik, Rodríguez, Echeverría; Castellani (60’ Barale), Catalán (85’ Cañas), Carabajal, Kmet; Castilla (60’ Magnetti) y Akerman. DT: Garré
SAN MARTÍN DE TUCUMÁN (0): Lavallén; Serrano, Monge, González; Oviedo (85’ Gil), Ávila, Zalazar, Cravero; Zárate (80’ Bernal); Rueda y Morales (90’ Cantero). DT. Roldán
Árbitro: Jiménez (bien)
Estadio: Arq. Etcheverry
DANIEL ROMERO
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